A medida que se acerca el Día de Acción de Gracias, a menudo se nos anima a reflexionar sobre nuestras vidas y sobre las cosas por las que estamos agradecidos. Esta es una gran práctica por muchas razones, incluyendo los beneficios que provee a nuestra salud mental, física y espiritual. La gratitud reorienta nuestra perspectiva de carencia a una de abundancia.
Practicar la gratitud es especialmente útil si te encuentras en una temporada de ansiedad y/o depresión. A medida que los días se vuelven más fríos y oscuros, muchas mujeres pueden sentir que su salud mental se ve afectada. O tal vez te encuentres en una etapa de la vida particularmente desafiante, como ser ama de casa y cuidar de tus pequeños o tener un trabajo estresante. No importa cuál sea la causa de tus problemas de salud mental, cultivar la gratitud es una excelente manera de combatirlos.
Entonces, ¿cuáles son algunas formas en que podemos usar la gratitud como un arma contra la ansiedad y la depresión?
Practica un Momento de Tranquilidad en la Mañana
Comenzar el día con una reflexión tranquila y oración antes de hacer cualquier otra cosa es una excelente manera de cambiar tu mentalidad a una de agradecimiento y satisfacción durante el resto del día. En lugar de apresurarte a comenzar el día pensando en todo lo que tienes que hacer y todas las preocupaciones que enfrentas, tómate solo de cinco a diez minutos para sentarte con una taza de café o té caliente y dejar que todo fluya por un momento, concentrándose solo en Dios y por lo que estás agradecida.
Es posible que debas liberarte conscientemente de tus miedos y preocupaciones antes de poder hacer esto, y eso está bien. Cuando tu mente divague con pensamientos ansiosos, guíala suavemente hacia atrás y enfócate en por lo que estás agradecida.
Puedes meditar en un versículo de la Biblia que te recuerda por lo que estás agradecida, o simplemente identifica y reflexiona en todo lo que es bueno en tu vida. Independientemente de cómo elijas usar ese tiempo de tranquilidad, el objetivo es comenzar tu día después en un estado mental más pacífico y agradecido. Si haces esto todas las mañanas, con el tiempo te resultará cada vez más natural.
Mantenga un Diario de Gratitud
Otra forma de mantener una perspectiva agradecida es llevar un diario de gratitud. A lo largo del día, escribe todo por lo que estás agradecida. Luego, cada vez que te sientas ansiosa o deprimida, puedes sacar tu diario (o teléfono, tableta o lo que sea que funcione para ti) y recordar todo por lo que puedes agradecer en tu vida.
Cuando nuestras mentes se sienten oscuras y tormentosas, puede ser difícil ver y recordar lo que es bueno, por lo que tenerlo escrito puede ayudarnos a recordar y romper esa oscuridad.
Estar Presente
La ansiedad se alimenta de preocupaciones por cosas sobre el futuro, mientras que la depresión generalmente se enfoca en nuestros fracasos o eventos pasados que han ocurrido. Es por eso que estar presente en el momento puede ayudarnos a cambiar nuestro enfoque del pasado o del futuro y ayudarnos a notar lo que es bueno en este momento.
Estar presente no conduce necesariamente a la gratitud, pero nos permite ver las cosas como son sin estar contaminadas por el pasado o las preocupaciones sobre el futuro. Una vez que podemos reducir la velocidad y realmente notar lo que sucede a nuestro alrededor, es más fácil ver por qué debemos estar agradecidas, mientras que cuando estamos preocupadas por el pasado o el futuro es casi imposible estar agradecidas.
Practicar la atención plena es una excelente manera de estar más presente en tu vida, así como la oración. Apaga las distracciones como las redes sociales, el entretenimiento y las noticias. Solo permítete estar en el momento en que estás y observa lo que sucede a tu alrededor. Sal y toma un baño en el sol, o llama a una buena amiga y rían juntas. Haz lo que te haga sentir más viva y despierta a la realidad. Comenzarás a notar que tu estado de ánimo mejora y tus pensamientos de agradecimiento se vuelven más prominentes.
Concéntrate en lo que Disfrutas
Es difícil no sentirse agradecida cuando estás haciendo lo que amas, ¿verdad? A menudo, podemos quedar atrapadas en la ansiedad o la depresión cuando estamos agotadas y no tenemos suficiente tiempo para hacer las cosas que disfrutamos.
Empieza a tomar un poco de tiempo todos los días, aunque sean sólo diez o veinte minutos, para hacer algo que te guste hacer, ya sea pintar, hacer yoga o leer un buen libro. A medida que pases más tiempo haciendo esas cosas que te refrescan y le dan energía, la gratitud fluirá naturalmente de ti.
Fíjate en las Cosas Pequeñas
Cuando nos encontramos en un estado de ansiedad o depresión, a menudo lo negativo eclipsa lo positivo. Puede haber muchas cosas buenas en nuestras vidas, pero no podemos verlas porque estamos viendo todo a través de una lente nublada. Ahí es cuando se vuelve crítico notar y estar agradecida por las pequeñas cosas.
Toma nota de todo lo que te trae alegría o consuelo en el día, incluso si es solo esa primera taza de café en la mañana o la forma en que tu hija se ríe cuando le haces cosquillas. Similar a llevar un diario de gratitud, a medida que notas y estás agradecida por esas pequeñas cosas a lo largo del día, será cada vez más fácil ver todo lo que tienes que agradecer.
Una Perspectiva Cambiada
A medida que cultivas estas prácticas en tu vida, notarás que no sólo tienes pensamientos más agradecidos, sino que te conviertes en una persona naturalmente más agradecida. Podrás reconocer más rápidamente y estar agradecida por las cosas buenas de tu vida, en lugar de obsesionarte con las malas y caer en la ansiedad o la depresión. Podrás apreciar tu vida más plenamente y, por lo tanto, vivir en un estado más profundo de satisfacción.
La gratitud es una herramienta maravillosa para ayudar a tu salud mental, pero si estás atrapada en la ansiedad o la depresión, también es importante buscar la ayuda de una terapista con preparación profesional. Estamos equipados en Florecer Family Counseling para ayudarte a superar tus luchas y desarrollar más gratitud en tu vida. ¡Comunícate con nosotros en cualquier momento!
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